Está sucediendo un gran cambio en el mercado global de trabajo. Los jóvenes de la llamada generación Y, también denominados millennials, nacidos entre principios de la década de 1980 y la de los años 2000, están comenzando a ocupar la mayoría de los puestos en empresas, gobiernos y, como no podía ser de otra forma, en el sector de ventas directas.
Es importante tener en cuenta que estos jóvenes tienen objetivos y valores muy diferentes a los de las generaciones anteriores. Nacieron prácticamente frente a una computadora y están acostumbrados a las tecnologías, generalmente son conocidos por su inmediatez, su afán por nuevas oportunidades y experiencias, su exigencia y búsqueda de trabajos más flexibles en empresas identificadas con sus valores personales.
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A pesar de que el perfil del joven se ajusta a las características que se esperan de la fuerza de ventas actual – flexibilidad, espíritu emprendedor, la capacidad de explorar canales digitales, entre otras – sin dudas es un desafío para las empresas mostrarse atractivas y fidelizar a los millennials. Es por eso que muchas compañías han apostado por estrategias para atraer y fidelizar vendedores, considerando que el público objetivo pertenecerá cada vez más a esta nueva generación, incluso en posiciones de liderazgo.
Empresas más atractivas
Es de la naturaleza misma de la venta directa ofrecer autonomía y estimular el espíritu emprendedor. Los revendedores son libres de elegir no solo los horarios en prefieren trabajar, sino también la(s) marca(s) que van a representar, los locales y el público objetivo. Pueden incluso ejercitar la creatividad en las ventas.
Los emprendedores independientes no tienen jefe y eligen su carga horaria y los resultados que pretenden lograr. La remuneración es directamente proporcional al esfuerzo realizado. Además, la barrera de entrada es a menudo baja: cualquier persona mayor de 18 años con poco capital disponible puede comenzar a revender productos.
Pero hay un elemento fundamental a considerar cuando se trata de los millennials: la tecnología. Solo las empresas que ofrezcan recursos de comunicación avanzados y canales digitales, podrán encantar a esta nueva generación. Para esto, las empresas necesitan transformarse digitalmente adoptando sistemas de gestión con capacidades omnicanal, es decir, una experiencia de compra unificada que integre canales físicos y digitales.
Con recursos mobile y una tienda virtual, por ejemplo, un millennial puede transformarse en algo más que un revendedor, convirtiéndose en un verdadero consultor. Las empresas incluso pueden ofrecer tiendas virtuales exclusivas del revendedor para que la comparta con sus clientes para que compren virtualmente, generando una comisión.
Este papel permite una mayor proximidad a los clientes, estrechando el factor humano de las ventas y asegurando el propósito que el joven busca en un trabajo. Es una forma de garantizar una experiencia relevante.
La tecnología como imán
Los recursos tecnológicos permiten que el revendedor aumente su capacidad de venta y su facturación, sin tener necesariamente que trasladarse para atender a sus clientes de manera presencial y dedicar más horas del día al trabajo, generando mayor eficiencia en el uso del tiempo por medio de la digitalización, preservando la tan deseada flexibilidad.
También es importante que las empresas de venta directa brinden subsidios a los revendedores, especialmente en forma de material de marketing visualmente atractivo, que pueda ser usado y compartido en las redes sociales y aplicaciones de mensajería más comunes. Estas redes son una parte fundamental de la vida de un millennial y pueden ser orgánicamente utilizadas.
Los millennials quieren estar relacionados con marcas que tengan valores similares a los suyos, por eso es importante que las empresas de ventas directas sean transparentes sobre sus valores y su cultura corporativa, además de las causas que apoyan, es decir que se posicionen claramente. Las causas sociales y ambientales son algunas de las más atractivas y serán utilizadas por el revendedor incluso como un argumento de venta.
Una comunicación más informal pero al mismo tiempo directa, también puede facilitar las relaciones con los revendedores millennials. Es importante que la comunicación sea lo más horizontal posible y que ellos se sientan respetados.
Para ofrecer una mejor experiencia para los revendedores de la generación millennial es necesario considerar algunos puntos clave. ¡Sepa cuáles son!